Por: Camilo Hernández.
De esas cosas curiosas que a uno le pasan, seguramente por algo; y que hoy quiero comentar, al cumplirse un año más del sensible fallecimiento de la destacada periodista, Lulica Maya.
En ese marco la recordamos con cariño, admiración y profundo respeto, dedicando estas líneas en su memoria.
Resulta que hace apenas unos días, revisando mis mensajes, me llamó mucho la atención uno en particular que encontré por casualidad, es el último enviado por nuestra apreciada amiga, y en él expresa textualmente: “Gracias Camilo” -mismo que se valora aún más porque ya se le dificultaba escribir, de hecho dejó de hacerlo ante sus problemas de salud-. Lo anterior en respuesta a una felicitación por el “Día de las Madres”.
Y quién lo iba a imaginar, un mes después habría de partir en el viaje sin retorno.
El tiempo pasa volando, y hoy con gran aprecio y sin otro afán que el de reconocer a una gran periodista, dedicamos una reseña en este espacio.
Se distinguió como una mujer amigable y de amena charla, muy conocida y querida en los círculos sociales.
¡Ay, gracias!, esa fue su expresión cuando le decíamos al visitarla como se le apreciaba entre las amistades en común, y ante ese reconocimiento platicado de haberse ganado un lugar muy especial en el periodismo, siendo una época en la que sobresalía como una de las pocas mujeres que se dedicaban a la labor de los “tundeteclas”; de hecho, un amigo periodista -de la vieja guardia- nos hizo notar que por sus años de trayectoria llegó a ser “decana” del periodismo en Tuxpan.
Aunque su fuerte era lo social, también fue muy asertiva en sus opiniones sobre política, siempre muy bien informada y abordando de todo un poco, contundente en sus apreciaciones y al defender su postura personal hacia tal o cual tema de la “polaca”.
Todavía recuerdo aquellas agradables pláticas en la mesa del café, que se prolongaban, tiempos en que había “debate de ideas” con el extinto luchador social y amigo en común, David Vargas Camargo, donde la amistad siempre sacó a flote las diferencias de criterio en los tópicos abordados.
Desafortunadamente al estar delicada de salud tuvo que retirarse de la labor periodística y sus salidas a reuniones se dificultaban cada vez más, pero su plática siempre fue muy amena.
Cumpliría 74 años (1 de julio de 2018), y de eso hablamos la última vez, la idea era celebrar en la medida de lo posible con algunas amistades, algo que le causó gran entusiasmo, lamentablemente el destino sería otro, pues falleció dos semanas antes (16 de junio 2018).
Ella misma nos comentó que sus inicios en el periodismo fueron hace muchos años, toda vez que desde muy pequeña se vio atraída por este oficio, siendo “El Heraldo de México” donde comenzó a incursionar en el medio, época en que vivía en la Ciudad de México, y eso la llevó a que años más tarde estudiara en la Escuela de Periodismo “Carlos Septién García”.
Pero su “casa editorial” sin duda que fue “La Opinión”, periódico para el que colaboró en distintos momentos, y en el cual empezó desde muy joven, siendo su fuerte siempre lo “Social”.
A lo largo de su trayectoria periodística de alrededor de 60 años, le dio vida a varias Columnas de Sociales, como la “Ensalada Tuxpeña” que -nos platicó en aquella ocasión- comienza a escribir en “La Opinión” primero con el nombre de “Rumores Tuxpeños”, cambiándola posteriormente.
Esta fue una Sección con la que prácticamente se retiró de los escenarios por motivos de salud, la famosa “Ensalada Tuxpeña”, a través de la cual le fueron publicadas infinidad de fotos de gente de Tuxpan con la respectiva redacción muy a su estilo particular que la distinguió siempre.
La prensa escrita era lo suyo, y la Sección de Sociales llevó su nombre también en el antiguo “Diario de Tuxpan” de la familia Arróniz, donde fue director por muchos años el Lic. Miguel Angel Cristiani González, formando parte del equipo reporteril de un medio impreso fuerte a nivel local en esos tiempos.
Justamente desde aquella época conocíamos a la amiga periodista, Lulica Maya, cuando nosotros apenas hacíamos nuestros “pininos”, gracias a la oportunidad brindada por el Lic. Miguel Angel Cristiani, lo que dicho sea de paso, nos trae gratos recuerdos.
En su actividad reporteril, Lulica Maya brilló con luz propia, su Sección llenaba una o hasta dos planas de Sociales con sus clásicas fotos y comentarios, ese era su perfil periodístico, con un estilo propio que la llevó a consolidarse como una de las mejores en Tuxpan.
Destacable por supuesto que en cierto tiempo también incursionó de manera independiente con una Revista llamada “La Farándula”, donde además de escribir, ella misma la distribuía, contando con el respaldo de varios patrocinadores, un medio propio que logró un buen posicionamiento en Tuxpan como resultado de la dedicación, esfuerzo y sello personal que siempre le imprimía a su trabajo, además de tener como principio profesional “La Exclusividad”.
Lulica Maya, una mujer inteligente y amigable, que sabía vestir con elegancia cuando asistía a los eventos como invitada y para realizar su trabajo, siempre buscando tomar fotos exclusivas para su gustada Sección de Sociales.
Periodista de una excelente redacción y estilo propio, a quien admiramos desde nuestros inicios, y a quien extrañamos mucho por esa amistad cultivada a través de los años, pero no le decimos adiós, sino hasta luego, pues todos llevamos el mismo camino, así son los designios de Dios, “Polvo somos, y en polvo nos convertiremos”, versa la frase bíblica...
*** Amiga Lulica Maya, descanse en paz, que Dios ilumine con mucha luz su camino, y hasta donde se encuentre le enviamos un enorme abrazo y felicitación con motivo de su Cumpleaños, siempre la recordaremos con gran afecto, pues ha dejado una huella imborrable en el corazón de todos los que la apreciamos.
Foto del Recuerdo.- La amiga periodista, Lulica Maya, hace unos años recibiendo un merecido reconocimiento por parte de la Asociación de Hoteles y Moteles de Tuxpan y la Huasteca Veracruzana por su amplia trayectoria periodística, que en ese momento presidía el C.P. Leopoldo Ramírez González, en acto protocolario realizado en el restaurante del Hotel Río Paraíso con la asistencia de varios hoteleros en el marco del "Día de la Libertad de Expresión".
¡Agradezco el favor de su atención!
D.M. Nos saludamos hasta la próxima entrega.
