Esta reflexión dominical, nace por el panorama actual de la situación política (elecciones). Las múltiples candidaturas y "n" cantidad de nombres que uno debe aprender. Pero así, es: Debemos. Aparte de ser un deber ciudadano, nos debe convenir reflexionar el voto. Hay frases como: el pueblo tiene lo que merece. Y ahí está el meollo del asunto. Podemos quejarnos toda la vida, pero por unos tantos que no salen a votar se suma a la no democracia.
Entiendo. Entiendo el hartazgo de la política, de la saturación de lo mismo de cada año electoral, PERO debemos saber algo. Hay política hasta en la casa.
La etimología de la palabra política es griega. Es el arte de los ciudadanos, el arte de la vida social, el arte de vivir bien. Los griegos acuñaron este término, así como democracia y más. Pero quiero resaltar que como tal, se le llama arte. Y el arte, en esencia es subjetivo. Entonces, partiendo de esa premisa…debemos comprender, que cada quien tiene un punto de vista de la manera de vivir bien, de vivir en sociedad, de ser ciudadano. Aunque alto. No se trata de subjetividad nada más, pues afortunadamente existe una Carta Magna. Existe una Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, hay valores y normas que nos direccionan a un bien vivir, es decir, pese a nuestra subjetividad, hay algo que nos rige, y no es propio para personajes políticos, sino para todos los ciudadanos.
No es lo mismo politizar todo a hacer política. Un político es aquél que debería ser íntegro en cumplir todas esas normas y buscar hacer políticas públicas que sean en favor de la sociedad. Un político es un servidor. Y la palabra servidor es como aplicada en campañas, pero olvidada al momento de quedar electos. Pero no solo es problema de ellos. Es que en su mayoría, los ciudadanos hasta nos peleamos en defensa de un político (no todos), olvidamos que son seres humanos, y la palabra servidor viene de la raíz, sirviente. Es decir, están para servirnos.
Partiendo de lo anterior, debemos conocer bien a quién queremos que nos sirva. Si es que es diestro para servir y si es íntegro para seguir órdenes, en este caso de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, y las normativas sociales; debemos ser vigilantes de que la persona que quede en esos puestos públicos, sean propositivo al mirar las necesidades de quien sirve.
Es importante que los mexicanos seamos consientes que ellos son los que nos sirven. Pero claro está… recordando palabras de alguien…si algún día quieres tener en tu casa alguien que te ayude para hacer el quehacer, para mandar, primero debes saber hacerlo. Así que, ciudadanos…si queremos exigir buenos funcionarios, debemos ser ciudadanos que sigan los valores y normas, debemos ser ciudadanos que conozcamos nuestra Constitución, que estemos informados, pues en nuestra casa, definitivamente no le daríamos el control a cualquiera, ¿o sí?.
Hay política hasta en la casa.