Por Jesús Alberto Rubio Salazar
Verá si no: continúa en el ámbito beisbolero de la Gran Carpa la polémica en torno a si Pete Rose merece o no ser indultado y tener la oportunidad de ser aspirante –como jugador o mánager-- a un nicho en el Salón de la Fama con Sede en Cooperstown, Nueva York.
Ya un servidor reciente abordé el tema y mi posición respecto a la propuesta del presidente Trump, teniendo por supuesto la diversidad de respuestas de colegas y aficionados amigos.
Hoy le tengo dos opiniones, del todo certeras:
Cesáreo Suárez Naranjo: En lo que dice Enrique Rojas --en relación a Pete Rose--, "obvio" que sería "como jugador" y no "otra categoría", que es lo que se está dilucidando. Sin embargo, si algo hay que tomar en cuenta, es la conducta ilícita.
En un artículo que leí allá por el 2000 en una revista especializada gringa, el autor expone el ejemplo siguiente: “Si un niño saca buenas calificaciones en la escuela, pero se descubre que ha estado copiando de algunos de sus compañeros, ¿se le debería premiar, por sus "buenas calificaciones, o castigarlo por NO hacer las cosas de manera correcta?".
Al Bat42: Órale.
Al Bat42: cosa.
Erick José Lantigua: en el debut en el Spring Training con Dodgers, el fenómeno japones Roki Sasaki dejó claro por qué es uno de los brazos más esperados en la MLB: tres entradas, dos hits, cero carreras, una base y cinco ponches. El Monstruo de la Era Reiwa.
Al Bat42: Ya veremos si sí o si no en campaña.
Sí: de qué está hecho para despejar dudas y expectativas.
Mire la clase de swing: https://x.com/FerAlvarez/status/1896804496220762341
Al Bat42: por supuesto, por supuesto, para el gran gusto de nuestro querido colega y hermano Eddy Henríquez Martínez (Al Bate).
¡23 carreras en un episodio!
Ocurrió en la parte baja del segundo capítulo, que no incluyó jonrones, triples y sólo cinco dobles. Acumularon en ese inning 11 hits, pero Holy Cross ayudó al otorgar ocho bases por bolas, golpear a cinco bateadores y cometer tres errores.
Después de que el inning comenzara con un inofensivo roletazo, 19 bateadores consecutivos de George Mason alcanzaron base.
El récord anterior de la NCAA de más carreras en una entrada pertenecía a los Shockers de Wichita State de 1984 y a los Nittany Lions de Penn State de 1983, con 21.
Según el Elias Sports Bureau, esto supera con creces el récord de MLB de más carreras anotadas en una entrada durante la Era Moderna (desde 1900). Ese récord lo establecieron los Medias Rojas el 18 de junio de 1953, cuando anotaron 17 veces en la séptima entrada en camino a una victoria de 23-3 sobre los Tigres.
Jud Wilson
Salón de la Fama y Museo Nacional del Béisbol de EU: Jud Wilson, nacido en 1894, medía solo 5 pies 8 pulgadas y pesaba 190 libras. Pero lo que le faltaba en altura, lo compensaba con pura fuerza y dedicación.
El miembro del Salón de la Fama fue considerado como uno de los bateadores más duros de las Ligas Negras, bateando .400 o mejor tres veces.
Hay especialistas, le diré, señalan que la cifra bateadora muy bien pudo haber sido la de .370 de por vida.