Por: Alfonso Aróstegui.
Desde que inició la pandemia, el autoempleo y las ventas por internet se han convertido en una forma honesta de llevar el pan a la mesa para muchos tuxpeños, que a raíz del cierre de sus centros de trabajo se han quedado sin el sustento diario.
Ante el distanciamiento social, sin mayores ingresos y con gastos en casa que van en aumento, la situación es muy difícil para las familias de escasos recursos económicos, por lo cual hay quienes sin otra opción, tienen que salir a buscar el sustento diario, aún con los riesgos de contagio en la calle, como lo reitera el Sector Salud.
Es común ver limpiaparabrisas en los cruceros o semáforos, otros tapando baches, algunos con sus propias cartulinas en mano, y otros más que salen a las calles a ofrecer sus servicios para desbrozar árboles, pintar casas, lavar coches o quienes buscan emplearse como trabajadoras domésticas; sin embargo, en realidad poca gente les da trabajo o unos cuantos pesos, ante la difícil situación económica.
Por otro lado, las ventas por catálogo, las ventas de tortas y tacos en puestos ambulantes, antojitos mexicanos se incrementaron notablemente con la modalidad de entrega a domicilio sin costo alguno, las ventas de cosas usadas como juguetes, trastes aparatos o ropa a través de redes sociales también abarrotaron las páginas de internet.
Algunas personas que accedieron a relatar sus experiencias expresaron que las ventas no han sido lo esperado, si bien es cierto en fechas especiales como las del pasado 10 de mayo o la del día del padre las ganancias sólo fueron para “sobrevivir” o recuperar la “inversión”, ya que al haber tantas ofertas de cosas y escaso circulante entre las familias, las ventas son bajas.
Con la reapertura de algunos negocios se espera que las cosas se tornen favorables en la nueva normalidad, y algunos recobren sus trabajos u obtengan nuevos, así lo deseamos.